• El Director General del FIDE, Raúl Talán, señaló que la eficiencia energética genera ahorros en la infraestructura eléctrica y coadyuva a la confiabilidad, seguridad y sustentabilidad de la red eléctrica.

Para potenciar la contribución del sector residencial y empresarial a la transición energética, el Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica (FIDE) consideró fundamental continuar con los esfuerzos de incorporar un mayor porcentaje de energía renovable, permitiendo que los hogares, así como las pequeñas y medianas empresas contribuyan de manera significativa, mediante la integración masiva de sistemas fotovoltaicos.

En el marco del Día Mundial de la Eficiencia Energética, el Director General del FIDE, Raúl Talán, destacó la importancia de ampliar incentivos energéticos para instalar sistemas fotovoltaicos en hogares, privilegiando subsidios a la inversión por una sola vez y eliminando paulatinamente subsidios al consumo eléctrico para toda la vida.

Dijo que en el caso de la energía eléctrica, la generación con fuentes renovables no debe limitarse a las aportaciones de las grandes plantas generadoras participantes en el Mercado Eléctrico de Mayoristas, ya que una mayor intervención del lado del usuario reduce sensiblemente el gasto de fuentes externas y acelera la transición energética para resolver el problema de cambio climático.

Raúl Talán aseguró que las acciones de eficiencia energética que se realizan del lado de la demanda, derivan en ahorros en la industria eléctrica y permiten ganar el tiempo requerido por el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) para llevar a cabo la transición energética de forma ordenada, e incrementar la capacidad de demanda ante la llegada de nuevas inversiones.

Refirió  que la eficiencia energética, además de ser la energía más barata y más rentable económica y ambientalmente, permite ahorros en la infraestructura eléctrica que se reflejan de manera inmediata en el descongestionamiento de las líneas de transmisión, distribución y comercialización, lo cual coadyuva a la confiabilidad, seguridad y sustentabilidad de la red eléctrica.

Además, permite disminuir la carga en cobranza en clientes de bajos ingresos y la incorporación de otros nuevos; se reducen pérdidas de distribución, ahorros en operación, mantenimiento y regulación de tensión, disminución del riesgo financiero, entre otros beneficios.

Mencionó que de 2012 a diciembre de 2023, a través de los Programas de Generación Distribuida del FIDE se han financiado 42, 895 sistemas fotovoltaicos en hogares, así como en micro, pequeñas y medianas empresas, con lo cual se han alcanzado 118.39 Megawatts de potencia instalada.

Aseguró que con dicha capacidad instalada se ha contribuido a transformar el mercado eléctrico ya que las micro, pequeñas y medianas empresas, así como los usuarios domésticos tienen la posibilidad de generar su propia energía eléctrica mediante sistemas fotovoltaicos y cogeneración eficiente de pequeña escala, lo cual representa importantes beneficios económicos y coadyuva a la mitigación del cambio climático, sin saturar ni desestabilizar la red de transmisión del SEN.